Normalmente, la fertilidad declina con la edad como todas las funciones del cuerpo humano. En la mujer, se puede observar desde aproximadamente los 30 años, haciéndose más pronunciado durante de la década de los 40s. El ovario humano contiene un número determinado de folículos establecidos antes del nacimiento que disminuyen con el aumento de la edad y culminan en la menopausia. La reserva ovárica representa el número y calidad de los ovocitos restantes.
Es importante, para todas las mujeres que están en su edad fértil, conocer su reserva ovárica si desean tener hijos; según la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva, es difícil predecir el ritmo del declive reproductivo en cada mujer. Sin embargo, conocer tu reserva ovárica te permitirá tomar decisiones importantes respecto a tu fertilidad.
La baja reserva ovárica o en inglés, diminished ovarian reserve (DOR), es un problema que afecta a entre el 9% y el 24% de las pacientes que se someten a tratamientos de Fecundación in Vitro (FIV).
Es una condición en la cual el ovario pierde su potencial reproductivo normal, comprometiendo la fertilidad. El término representa a mujeres en edad reproductiva que tienen menstruaciones regulares y cuya respuesta a la estimulación ovárica o a la fecundidad es reducida en comparación con las mujeres de su misma edad. La baja reserva ovárica es distinta de la menopausia o la insuficiencia ovárica prematura.
Esta ocurre comúnmente como resultado del envejecimiento normal de los ovarios. Sin embargo, existen otros factores que también pueden contribuir:
Desafortunadamente, la mayoría de las mujeres no presentan síntomas cuando sufren de baja reserva ovárica. A medida que la condición progresa con el tiempo, las mujeres pueden notar un acortamiento de su ciclo menstrual (por ejemplo, ciclos de 28 días reducidos a 24 días). Una vez que la menopausia es inminente, las mujeres pueden notar signos de niveles bajos de estrógeno, como sofocos, problemas para dormir, períodos menstruales intermitentes y sequedad vaginal.
Existen diversas formas de evaluar la reserva funcional del ovario, las más frecuentes son la ecografía vaginal y la prueba de la hormona antimulleriana que se realiza en una analítica de sangre.
Es importante tener en cuenta que, si bien estas pruebas son importantes para diagnosticarla, ninguna prueba es absolutamente definitiva cuando se trata de determinar si te puedes quedar embarazada o no.
Tu médico puede recomendarte una ecografía transvaginal al comienzo de tu ciclo. Esto es para medir la cantidad de folículos antrales (entre 2 y 10 milímetros) en ambos ovarios. Los folículos son pequeños sacos dentro de los ovarios que están llenos de líquido y contienen un óvulo cada uno. El conteo de folículos le permite a su médico saber cuántos óvulos hay disponibles.
La prueba de la hormona antimulleriana o AMH se realiza con una simple analítica de sangre. Sus niveles se relacionan con la cantidad de óvulos disponibles para la fertilización.
Aunque en este momento no existe un tratamiento específico para la baja reserva ovárica ni para contrarrestar el envejecimiento normal de los ovarios, los especialistas pueden evaluar cada caso individualmente y recomendar diversas opciones de tratamiento para preservar la fertilidad o ayudar a conseguir un embarazo.
Una vez que tu médico diagnostique la disminución de la reserva ovárica, podría sugerir preservar óvulos para un futuro embarazo si no quieres quedar embarazada inmediatamente. Si intentas conseguir un embarazo dependiendo de tu edad y los resultados de tu reserva ovárica el médico te dará sus recomendaciones.
Los tratamientos de reproducción asistida son recomendados frecuentemente a mujeres con esta condición, empezando con una estimulación ovárica mediante el uso de hormonas o medicamentos para conseguir el máximo número de ovocitos.
Como habíamos mencionado anteriormente la reserva ovárica no se puede cambiar, pero si la calidad de tus óvulos. Consiguiendo una mejor calidad podrás aumentar tus posibilidades de quedarte embarazada. Usando los suplementos y vitaminas correctos, manteniendo un estilo de vida saludable, alejándote de las sustancias toxicas que pueden estar afectando tu fertilidad podrás mejorar tu fertilidad.
Enfrentarte a un diagnóstico de baja reserva ovárica puede ser atemorizante y desconcertante a la vez, puede ser que te haya tomado por sorpresa y que no te sientas preparada para enfrentarlo pero es importante recordar que tienes opciones, que con los avances de la ciencia y la tecnología los resultados de los tratamientos de reproducción asistida cada vez son más prometedores y que vencer tus miedos y enfrentarte a la infertilidad es posible.
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